del Chirlo al Soplo

Crezco de lo que se renueva, por ser inútil en contestarle a: éste zarpazo del aire,
a ese chirlo de la respiración honda de otra noche sin perfume, ¡sin el mínimo perfume que vuelve, de dos distancias a la vez,
por el camino seguro! (por el que tarda mucho mas)
Ese, ese que tiene promesas de maicena, y gustitos al final.

Yo no quise estar creciendo ni un minuto de mas, solo busqué pasarme de parada.
Como para ayudar a las lagrimas con chirlitos que devengan en trompadas, mas circunstanciales.
Asi fui haciendo mal una copla tras otra y bajo distintos puntos de soplo.

Mi mañana sin ánimo, fue unánime para las que comparten la mesa conmigo.
Y la mañana de ayer, que se salvó de milagro despues de que se devoró la tarde. Y la noche fue respirar con vos.



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Mirá a lo que te invitaste

al final hice esto